En 1577, Pic Saint Loup, gran modisto venido a menos, recibe una misión diplomática del rey Enrique III: confeccionarle un traje de ceremonia de inigualable belleza para la boda concertada de uno de sus sobrinos con la hija de un Grande de España.
En 1577, Pic Saint Loup, gran modisto venido a menos, recibe una misión diplomática del rey Enrique III: confeccionarle un traje de ceremonia de inigualable belleza para la boda concertada de uno de sus sobrinos con la hija de un Grande de España.